Existen tres técnicas fundamentales por las que las personas usuarias pueden elegir los símbolos para construir frases:
- Técnica de exploración o indagación
- Selección directa
- Selección codificada
La técnica de exploración consiste en la selección de los iconos-significados seleccionando aleatoriamente y descartando hasta llegar al deseado por el usuario. Técnico y usuario deben pactar la forma de comunicar la selección o rechazo del símbolo, éstas pueden ser el uso de un plafón más convencional, respuestas de si-no o la gestualización de determinados gestos faciales o corporales.
En resumen, el técnico va señalando símbolos hasta que el usuario, de alguna forma preestablecida le expresa que ha dado con el símbolo adecuado.
La selección directa consiste simplemente en la señalización (normalmente con el dedo aunque también podría ser con la mirada) del símbolo deseado por el mismo usuario. Esta técnica es la más usada y la más recomendada para personas con discapacidad intelectual ya que aprenden sistemas gráficos mientras que mantienen un buen nivel de control motriz.
La selección codificada divide y sintetiza las palabras primero mediante categorías que se codifican en colores (verdes: verbos, azules: elementos descriptivos, amarillos: nombres propios, etc) y por otro lado fichas con números cuyas combinaciones se corresponde mediante un código a palabras concretas. De esta manera, en primer lugar el usuario señaliza la categoría-color y más tarde la palabra-número que se corresponderá a una u otra palabra en función a la categoría anteriormente expresada.
lunes, 11 de mayo de 2015
Plafones y cuadernos de comunicación
Los plafones y los cuadernos de comunicación son instrumentos diseñados para adaptar la comunicación a las necesidades específicas de personas con dificultad para adquirir o producir el lenguaje hablado. En ellos aparecen símbolos y dibujos con su mensaje o término escrito para poder expresarse a través de la interpretación visual. Estos instrumentos son personales debido a que deben adaptarse a la comunicación en la vida cotidiana de cada individuo por lo que hay tantos plafones y cuadernos como número de personas que lo necesitan. Asimismo, en cada cuaderno o plafón suele ir escrito el nombre, teléfono, dirección e incluso algunos datos sebre gustos y aficiones o curiosidades de la persona que lo porta.
Cuando los plafones son demasiado grandes y no facilitan por ella la integración del individuo en un ambiente de comunicación normalizada, se usan los cuadernos, que tienen un tamaño más reducido y ordenan los dibujos en función a categorías, por lo que la comunicación se hace más fluida; además los cuadernos son plegables y fáciles de guardar y almacenar.
Los plafones y los cuadernos de comunicación no sirven para sustituir el lenguaje oral, si no para complementarlo, entrenarlo, reforzarlo y ayudar a su aparición y desarrollo.
Cuando los plafones son demasiado grandes y no facilitan por ella la integración del individuo en un ambiente de comunicación normalizada, se usan los cuadernos, que tienen un tamaño más reducido y ordenan los dibujos en función a categorías, por lo que la comunicación se hace más fluida; además los cuadernos son plegables y fáciles de guardar y almacenar.
Los plafones y los cuadernos de comunicación no sirven para sustituir el lenguaje oral, si no para complementarlo, entrenarlo, reforzarlo y ayudar a su aparición y desarrollo.
¿Qué son los Sistemas Aumentativos y Alternativos de Comunicación (SAAC)?
Los Sistemas Aumentativos y Alternativos de Comunicación (SAAC) son formas de expresión distintas al lenguaje hablado, que tienen como objetivo aumentar (aumentativos) y/o compensar (alternativos) las dificultades de comunicación y lenguaje de muchas personas con discapacidad.
La comunicación y el lenguaje son esenciales para todo ser humano, para relacionarse con los demás, para aprender, para disfrutar y para participar en la sociedad y hoy en día, gracias a estos sistemas, no deben verse frenados a causa de las dificultades en el lenguaje oral. Por esta razón, todas las personas, ya sean niños, jóvenes, adultos o ancianos, que por cualquier causa no han adquirido o han perdido un nivel de habla suficiente para comunicarse de forma satisfactoria, necesitan usar un SAAC.
Entre las causas que pueden hacer necesario el uso de un SAAC encontramos la parálisis cerebral (PC), la discapacidad intelectual, los trastornos del espectro autista (TEA), las enfermedades neurológicas tales como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), la esclerosis múltiple (EM) o el párkinson, las distrofias musculares, los traumatismos cráneo-encefálicos, las afasias o las pluridiscapacidades de tipologías diversas, entre muchas otras.
La Comunicación Aumentativa y Alternativa (CAA) no es incompatible sino complementaria a la rehabilitación del habla natural, y además puede ayudar al éxito de la misma cuando éste es posible. No debe pues dudarse en introducirla a edades tempranas, tan pronto como se observan dificultades en el desarrollo del lenguaje oral, o poco después de que cualquier accidente o enfermedad haya provocado su deterioro. No existe ninguna evidencia de que el uso de CAA inhiba o interfiera en el desarrollo o la recuperación del habla.
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